El aceite de oliva ayuda a proteger al sistema inmunológico disminuyendo la muerte celular. En anteriores estudios se ha demostrado que el aceite de oliva virgen tiene numerosos beneficios para el organismo.
El aceite de oliva ayuda en el proceso de digestión actuando como antibacteriano, previniendo las enfermedades cardiovasculares y a disminuyendo el colesterol malo. A todos estos efectos beneficiosos para el organismo hay que sumarle el recientemente descubierto, el aceite de oliva virgen disminuye la muerte celular. Esta muerte de las células es la causante de la absorción de grasas en el proceso de digestión. El aceite de oliva virgen actúa como antiinflamatorio sobre los vasos sanguíneos evitando, en gran parte, la absorción de las grasas. Este efecto beneficioso se ve aumentado si junto con la ingesta de aceite de oliva se incluye pescado azul en la dieta, rico en ácidos grasos Omega-3.
El estudio se podría resumir en la siguiente sentencia: el aceite de oliva virgen disminuye la muerte de las células durante el proceso digestivo, que es el principal motivo de absorción de grasas.
El aceite de oliva también ayuda a reducir la inflamación de los vasos sanguíneos que se produce después de la absorción de grasas.
El cuerpo humano, después del proceso de la digestión, entra en un estado llamado proceso pospandrial, en este estado se produce la muerte celular debido a las grasas que se han absorbido durante la digestión. El aceite de oliva ayuda a reducir la inflamación de los vasos sanguíneos durante este proceso. De esta forma el aceite de oliva virgen, al contrario que otros tipos de aceites, reduce la muerte de estas células.
La continuidad de este problema puede causar enfermedades cardiovasculares muy graves. Las arterias, poco a poco, se obstruyen provocando una isquemia (disminución del riego sanguíneo causando la muerte celular). Cuando las arterias están obstruidas pueden liberar un trombo, que sería arrastrado por el torrente sanguíneo, pudiendo bloquear otras arterias y causar infartos de miocardio, cerebrales, pulmonares…
Este estudio demuestra que las grasas monoinsaturadas presentes en el aceite de oliva virgen ayudan a reducir los niveles de colesterol malo y los triglicéridos durante la digestión. Además el efecto mencionado aumenta con la ingesta de ácidos grasos Omega-3 de cadena larga. Los ácidos grasos Omega 3 de cadena larga son los que se encuentran en el pescado azul.
Un estudio elaborado por la Universidad de Medicina de la Universidad Wake Forest en Estados Unidos explicaba como los ácidos grasos Omega-3 ayudaban a prevenir enfermedades cardiacas e incluso se ha demostrado también sus beneficios en la prevención del cáncer de mama. La explicación de este efecto es que el Omega 3 presente en el pescado modula la muerte celular programada o apoptosis.
El estudio PREDIMED, el mayor estudio realizado últimamente sobre los efectos de la dieta mediterránea, demuestra como el aceite de oliva virgen extra tiene una acción protectora para el corazón. Una dieta rica en aceite de oliva virgen extra se ha mostrado mucho más beneficiosa para el organismo, en personas con problemas cardiovasculares, que una dieta baja en grasas.
En este estudio se intentaban conseguir pruebas definitivas sobre los beneficios de la dieta mediterránea en la prevención de enfermedades cardiovasculares. Las conclusiones que se pueden extraer del estudio son claras. Los voluntarios que fueron tratados con una dieta rica en aceite de oliva virgen, notaron una disminución del 8% en los indicadores de inflamación de las arterias.
El consumo de aceite de oliva virgen ayuda a reducir el colesterol LDL o colesterol malo a la vez que ayuda a aumentar el colesterol bueno y a prevenir la inflamación de los vasos sanguíneos después de la digestión. Para prevenir la inflamación de los vasos sanguíneos el aceite de oliva actúa sobre la mortalidad de las células, que se produce después de la digestión, debido a la absorción de las grasas.
Dadas las pruebas mostradas sobre los efectos beneficiosos del aceite de oliva virgen extra, científicos del Hospital Reina Sofía de Córdoba están preparando un informe para que la Unión Europea permita añadir, en las etiquetas de los envases de aceite de oliva virgen, la información de sus características beneficiosas para el organismo. Mediante este informe, se pretende incluir al aceite de oliva virgen, como un alimento saludable dentro de la Unión europea, ya que existe un máximo en el nivel de grasas, azucares o sales que los productos pueden contener para considerarse “saludables” por la Unión Europea.
Los científicos esperan que este límite en la cantidad máxima de grasas que puede tener un producto saludable, no se aplique al aceite de oliva virgen, ya que se ha demostrado en numerosas ocasiones que las grasas del aceite de oliva virgen son beneficiosas para el organismo.